Inaugurado el pasado noviembre, el Paisaje de Aprendizaje construido en el Instituto Pascual Baburizza (IAPB), en Los Andes, se ha transformado en un espacio que invita a los y las estudiantes a conectarse a diario consigo mismos y con el entorno. Llamado “Bosque en movimiento”, este nuevo «patio vivo» dentro del patio escolar, permite reflexionar y sentir mucho más de cerca la naturaleza; la brisa del viento, la textura del pasto, el olor de la tierra y el estar consciente de los otros seres vivos que ahí habitan, según nos contó en una entrevista Carlos Valderrama, rector del establecimiento.
“Este es un espacio privilegiado para representar uno de nuestros sellos característicos: el amor por la tierra. Nosotros lo estimulamos para que esto se convierta en una postura de vida, frente al mundo natural. Este espacio se ha transformado en un estímulo muy fuerte para tomar conciencia de lo que tenemos, su cuidado y de cómo cada una de nuestras acciones impactan en los otros, en el mundo natural”, cuenta el rector de IAPB.
“Bosque en movimiento” se ha transformado para la comunidad escolar, en un lugar que promueve y genera aprendizajes muy significativos para esta, sobre todo en el área de convivencia escolar y de formación personal. Según cuenta Carlos Valderrama, los asientos bajo la sombra de los árboles son un espacio privilegiado para realizar tutorías personales y grupales con los estudiantes. Así como también una gran loma, que permite congregarse fácil y cómodamente, para realizar clases al aire libre y así cambiar la rutina al salir de las salas.
“Los mismos alumnos han reportado que este es un espacio privilegiado para el encuentro consigo mismos y para la tranquilidad. Hay un aporte inmediato, concreto y significativo”, afirma el rector, y añade: “Nosotros recibimos a estudiantes con niveles de agresividad y violencia bastante naturalizados. Nos cuesta poder invitarlos a un ritmo más calmo, que los predisponga mejor hacia el aprendizaje.